Rodrigo Gallo es un joven mexicano apasionado de 22 años. Desde pequeño a Rodrigo le ha interesado el mundo artístico, comenzó con dibujos y pinturas; él miraba y aprendía de sus dos hermanos mayores que se la pasaban tocando la guitarra, le empezó a llamar la atención la música. Hoy en día, a pesar de haber estudiado gastronomía y ejercer en un pequeño café, le dedica una gran parte de su tiempo a crear y experimentar con diferentes sonidos para transmitir lo que siente a través de la memoria.