Tras una impulsiva aventura amorosa con su joven y espectacular secretaria, Walter Pearce se siente avergonzado y totalmente arrepentido. Dominado por el pánico, decide confesar la indiscreción a la que ha sido su esposa durante 24 años el día de su aniversario de bodas. Ante la revelación, su mujer Deborah le echa a patadas de casa a media noche. Entretanto, el arrogante Skylar Echerman, una emergente estrella de fútbol americano del instituto local, se lesiona de gravedad, por lo que deberá guardar reposo en casa durante la larga convalecencia. Skylar y Walter, que hasta el momento han sido vecinos, se sienten muy unidos en su profunda desgracia ahora que los sueños de ambos han sido aniquilados. Por ese motivo deciden vivir juntos en casa del primero, en lo que será una convivencia desastrosamente irresponsable.